Hoy, 11 de mayo, hace justamente 10 años, publiqué mi primera entrada en el blog, El Karma en nuestras Vidas, del Dr. José Cabodi.
Aún recuerdo las dudas y los nervios que me asaltaban. ¿Valía la pena publicar artículos de carácter filosófico-espiritual habiendo tantas buenas webs que tratan de los mismos? ¿Alguien se dignaría a visitar un humilde y sencillo blog que, en principio, solo se dedicaría a difundir artículos de otros que ya corrían por la red? Pero, ¿qué circunstancias me motivaron a crear un blog?
En aquel entonces me encontraba saliendo de una crisis y, al igual que muchas personas, cuando las cosas no van del todo bien, intenté buscar consuelo en la espiritualidad. No es que fuese una persona que no me considerase espiritual. Ya en mi juventud y durante algunos momentos de mi vida ya había leído e interesado por lo espiritual (sobre todo literatura teosófica y de tipo orientalista) pero quizás en aquellos tiempos las circunstancias hicieron que mostrase un mayor interés que en otras.
Empecé a tener un profundo interés en leer libros y mas libros, principalmente teosóficos, puesto que fue la filosofía que mejor encajaba (y aún encaja) en mi forma de ser en aquel entonces, habiendo con el tiempo evolucionado y encontrándome en la actualidad centrado en las enseñanzas del Maestro Tibetano (Djwhal Khul), las cuales, no dejan de ser teosóficas pero a un nivel quizás mas técnico.
Después y con el tiempo, se me ocurrió pensar que todo lo que leía, extractaba y recopilaba, aunque en un principio lo hacía por ser mi manera de estudiar, podría quizás ser útil a otras personas que por desgracia no tuviesen el tiempo o la disponibilidad necesaria que estas enseñanzas requieren, o que probablemente no todo el mundo había tenido la suerte de que alguna de estas enseñanzas hubiesen llegado a su alcance, por lo que pensé que podría ser una buena idea compartirlas, y que mejor lugar que un blog en donde poder ir publicando todo aquello que creyese que pudiese ser de interés para otros.
Así comenzó la andadura de este blog. En principio y dada mi inexperiencia en estos temas, empecé publicando artículos de otras personas que de una manera u otra me habían llamado la atención y consideraba interesantes. Mas adelante empecé a dar mis opiniones sobre algunos aspectos que consideraba importantes sobre lo publicado y ya, en la actualidad, me atrevo a dar mis propias opiniones y reflexiones al considerar que, tanto el bagaje como las enseñanzas aprendidas aplicadas a ese bagaje, me dan una cierta confianza y seguridad.
Han pasado 10 años y ahora, viendo el pasado en perspectiva y desde otro ángulo, empiezo a comprender aspectos y circunstancias que en esos momentos me era imposible imaginar. Todo y todos evolucionamos y con los años vamos cambiando. Toda experiencia que nos sucede no es casual y viene motivada por una intencionalidad que en su mayor parte proviene de nuestra alma. Ella, habiéndose propuesto una labor a realizar mientras dura la encarnación y limitada por el karma personal, va llevándonos sutil (y a veces no tan sutilmente por medio de experiencias dolorosas) hasta sus objetivos, los cuales puede que se cumplan o no. Si somos observadores dependerá (y mucho) del caso que hagamos a los indicios que la vida nos va presentando a modo de experiencias, las cuales, algunas de ellas, no pueden ser entendidas si no se hace desde una lógica espiritual. Si estamos atentos, podremos observar que la vida (a veces) suele torcerse cuando también lo hace el propósito del alma, es decir, cuando por voluntad propia nos desviamos conscientemente de lo que creemos que deberíamos de hacer pero no lo hacemos, ocurriendo lo contrario cuando, conscientemente o no, fluimos en la misma dirección que el alma se ha propuesto.
Es cierto que todo esto es relativo y no forzosamente tiene porqué ser para todos igual, pero sí que como consejo me atrevería a decir que de vez en cuando analicemos nuestra situación actual con respecto al pasado y comparemos la misma. Es posible que si nos fijamos bien surjan indicios que nos puedan ayudar a dirigir nuestro rumbo hacia el destino mas adecuado y, si es así, quizás (y digo quizás) nuestro futuro pueda llegar a ser mejor que nuestro pasado.
Quiero agradecer a los 570.200 visitantes que a fecha de hoy habéis pasado por el blog, a los que continuáis pasando y a los que quizás en un futuro lleguéis a pasar, vuestra presencia y comentarios a los que los dejáis, dado que se aprende enseñando y se enseña aprendiendo. También aprovecho para pedir disculpas por todo aquello que no haya podido o sabido hacer mejor y por todos los errores que haya podido cometer.
Gracias por vuestra compañía, virtual en algunos y real en otros.
Dani
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