domingo, 29 de octubre de 2017

DIALOGOS CONMIGO MISMO (III)




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Ciencia y Espiritualidad 

La falta de entendimiento entre ciencia y espiritualidad. Uno de los problemas que la humanidad deberá resolver en algún momento si el ser humano quiere avanzar en su desarrollo integral.

El principal (y creo que hasta el momento irresoluble) problema que tiene la ciencia, es el de investigar los efectos y no profundizar en las causas que los provocan. El método científico necesita de unos argumentos que, en determinados aspectos, no puede ofrecer la espiritualidad (hasta que la ciencia lo descubra. Recordemos que siglos atrás, muchas de las evidencias que hoy nos resultan familiares y aceptadas, era consideradas como imposibles o irreales), pero aunque así sea, si queremos descifrar muchos de los enigmas que envuelven a la humanidad, los postulados espirituales deberían de admitirse aunque sólo fuese en clave de hipótesis o posibilidad, permitiendo a la ciencia de esta manera quizás llegar a un punto en que, empíricamente, pueda alcanzarse la clave y el descubrimiento de aquello a lo que hasta ahora se ha negado a aceptar.


Espíritu Santo

A Dios se lo suele representar (al menos en las religiones cristianas) con un triángulo que representa (intenta representar de hecho, ya que difícilmente como seres humanos podemos llegar a entender e imaginar la inconmensurabilidad de Dios) los tres Aspectos Del Mismo: 1r Aspecto, la Voluntad (el Padre de la religión cristiana); 2do Aspecto, el Amor (el Hijo); 3r Aspecto, la Inteligencia (el Espíritu Santo).

La Voluntad equivaldría al Espíritu (la Energía de Dios), el Amor equivaldría al Alma (el Amor de Dios, el Ánima Mundi, el Alma de todas las cosas) y la Inteligencia equivaldría a la materia, o a todas las formas (visibles o no) de Dios, es decir, a la manera en que Dios se manifiesta por medio de toda sus formas (toda Su Creación).

Voluntad ----> "El Plan de Dios"
Amor ---------> "La herramienta para la ejecución del Plan de Dios"
Inteligencia--> "La realización del Plan de Dios"

El tema es bastante mas complejo, pero de forma muy simplista podríamos resumirlo así.

El Espíritu Santo equivaldría a la Inteligencia por la cual se realiza el Plan de Dios


Voluntad de Dios

Debemos hacer las cosas de una forma correcta no porque Dios nos imponga su voluntad, sino porque actuando correctamente, llegaremos a comprender la voluntad de Dios, y entonces actuaremos no porque se imponga Su voluntad, sino porque nosotros mismos lo realizaremos por voluntad propia coincidiendo con la Suya


Dogmatismo

Recitar lo que se dice en libros es importante, pero también lo es el impregnarlo con la experiencia y visión propia, ya que es por medio de la misma la que nos permite evolucionar.

Es el gran problema de toda religión, filosofía o doctrina. Todo evoluciona, todo, y precisamente el no adaptar las ideas de la Sabiduría Perenne a los nuevos tiempos es lo que convierte a determinadas creencias en desfasadas y cristalizadas realidades.

Lo que en un tiempo fue útil (y necesario) para una determinada humanidad y época, no tiene porque ser igual de útil para una humanidad y época posterior, dado que la humanidad ha evolucionado (como todo) y necesita adaptar e incrementar las enseñanzas a sus tiempos.

Las bases de La Sabiduría siempre son las mismas, pero el desarrollo de las mismas cambia en la misma proporción que cambia el ser humano


Simbolismo del Loto

De las profundidades y lo mas denso de la materia (plano físico), asciende por el agua (espejismo o plano astral) hasta llegar a la superficie (plano mental), donde abre sus pétalos, muestra su auténtica realidad y conecta con su Yo Superior (el aire).


Dolor y Sufrimiento

Creo que no es necesario el sufrimiento para evolucionar.

El dolor es el resultado de la fricción entre lo que se encuentra en la misma dirección del Plan Divino y su opuesto. Nadar contracorriente agota, ir en su misma dirección, no.

Cuando el alma predomina no debería de haber dolor puesto que actúa en la dirección correcta. Somos nosotros, la mayoría se seres humanos que aún nos encontramos mas influenciados por la personalidad la que, al actuar erróneamente (a veces por inconsciencia), provocamos fricción al no fluir en la dirección correcta y, por tanto, sufrimiento.

El dolor nos cueste aceptarlo o no, es un duro maestro que, mediante la experiencia desagradable, nos reconduce e indica la dirección correcta a seguir

Dani

lunes, 16 de octubre de 2017

DIALOGOS CONMIGO MISMO (II)



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Libre Albedrío

El ser humano tiene libre albedrío dentro de unos "ciertos límites", es decir, hablando en términos absolutos no es 100% libre en sus actos y decisiones (aunque el lo crea), ya que existe una parte de karma y de energías que están mas allá de su control como ser.

El ser humano puede, en lo que a el mismo afecta, variar el karma y destino, pero no el de su país o el de la humanidad en su conjunto.

Por otro lado tenemos las fuerzas y energías que llegan de mas allá de nuestro planeta y condicionan inevitablemente las circunstancias de este. El Logos planetario tiene su propio Karma (como toda entidad) y este (en cierta manera), afecta a todas los seres que componen Su existencia. De igual forma que, por ejemplo, si un ser humano se intoxica con bebidas alcohólicas, no solamente sufre él las consecuencias como ser, sino que sus células (como pequeñas unidades de vida menores) reciben parte de "ese karma" sin ser en principio merecedoras del mismo.

La mayor parte del karma y, en consecuencia, del destino suele estar relacionado con el propio individuo, pero a veces, no todo lo que se recibe (tanto negativo como positivo) se es merecedor del mismo. Eso sí, nada queda en el olvido y la perfecta Ley de Acción y Reacción equilibra los pares de opuestos.

En resumen, todo está conectado y como pequeñas unidades de vida que formamos parte de Una de mayor, somos partícipes de parte de su karma, de igual forma que pequeñas unidades de vida que conforman nuestro ser, participan también de nuestro propio karma.

El karma es Universal y, aunque evidentemente a niveles de perfección imposibles de imaginar por nuestro cerebro, lo que para nosotros (a nivel humano) puede llegar a ser "la perfección", para Grandes Entidades es imperfección (o perfección incompleta aún) y, por tanto, genera karma, ya que recordemos que Todo sin excepción está evolucionando y a Su excelso nivel no se encuentra completamente concluido.

A nivel personal y como reflexión propia, la Ley de Acción y Reacción (Karma) es el motor que mueve el Universo, ya que empuja hacia la perfección mediante la evolución y evita que "aquello", por muy perfecto o imperfecto que sea, se paralice, cristalice y deje de mejorarse.


Verdad

Existen tantas verdades como seres pueblan el Universo. Una vez se unan todas ellas en Una de sola, el puzzle estará completo y la Verdad Absoluta surgirá resplandeciente.


Conocimiento de Uno Mismo

Ya lo decía una inscripción a la entrada del oráculo de Delfos, "Hombre, conócete a ti mismo y conocerás el universo y a los dioses". Es indispensable conocernos para descubrir lo que somos y nuestro papel a desempeñar.


La Lucha contra el Mal

Los Maestros ya lo dicen que no hay que combatir al mal ( ya que la energía sigue al pensamiento, y si se piensa en el mal, se refuerza a este), sino "hacer el bien". Haciendo el bien aumentamos el mismo y permitimos que el mal (al no estimularlo) no aumente, y así irá perdiendo fuerza y los Maestros y Grandes Seres podrán actuar más eficazmente contra el mismo.

HACER EL BIEN. Ese es el secreto para "sellar la puerta donde se encuentra el mal" (La Gran Invocación, cuarta estrofa).


Dani
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