Sé humilde, si quieres alcanzar la Sabiduría.
Sé más humilde aún, cuando de la Sabiduría seas dueño.
Sé a manera del océano, que recibe todos los ríos y torrentes. La poderosa calma del mar permanece inalterable, sin sentirlos.
Refrena tu yo inferior mediante tu Yo divino.
Refrena lo Divino por medio de lo Eterno.
Grande, en verdad, es aquel que aniquila el deseo.
Más grande aún es aquel en quien el Yo divino ha destruido hasta la noción del deseo.
Vigila lo Inferior, no sea que mancille lo Superior.
El camino de la Liberación final está dentro de tu YO.
Aquel camino empieza y termina más allá del YO.
Fuente: La Voz del Silencio - H.P.B.
- - - - -
Recuerdo algo que Vicente Beltran nos havia repetido algunas veces cuando nos reuníamos en grupo:
ResponderEliminar"El orgullo espirtual es un peligro muy sutil del cual no nos damos cuenta hasta sufrir sus efectos"
Sin humildad levantamos muros de separatividad en vez de derrivarlos.
Por más conocimientos espirituales o meditaciones que realicemos, si no existe suficiente amor en nuestro corazón jamás seremos verdaderos servidores de la humanidad ni podremos reconocernos como el Yo.
Gracias Dani.
Todo cuanto llega a nosotros tiene una razón de ser. Siempre hallamos una palabra o frase en el momento oportuno que nos hace reflexionar y dirigir la mirada hacia nuestro interior.
Un abrazo
Años después de su muerte, por la gran labor de difusión que realizan sus seguidores, he podido conocer su obra. No tuve la suerte de conocer a Vicente en persona. Es una de las personas a la que me hubiese gustado conocer.
ResponderEliminarGracias por tu comentario Marta.
Un abrazo
Yo si tuve la ocasión de compartir con Vicente sus jornadas madrileñas y también en Barcelona. Su mensaje nos dejó huella y perspectivas.
ResponderEliminarMiguel M. de Paz
Miguel M. de Paz
Me alegro que tuvieses la oportunidad de conocerlo personalmente Miguel.
EliminarYo, aunque no personalmente, sí que me siento muy identificado con su mensaje.
Gracias
Una maravilla de poema que invoca la luz.
ResponderEliminarBlavatsky siempre será Blavatsky.
EliminarGracias Ana